miércoles, 16 de noviembre de 2011

Si els socialistes catalans anem a votar el dia 20, les enquestes seran paper mullat


- La candidata del PSC a les properes eleccions generals, Carme Chacón, diu que canviaria totes les enquesta per un sol vot i afirma que “si els socialistes catalans anem a votar el proper dia 20 de novembre, aturarem la dreta i les enquestes seran paper mullat!”. Chacón ha recordat que el Partit Popular vol ara una majoria molt àmplia “per sumar més poder sumar en els ajuntaments, més poder amb els jutges i amb els poderosos econòmics, més poder per proscriure periodistes independents i per indemnitzar dirigents caixes d’estalvis”. A més, ha retret a Rajoy que digui que no sap què és el pacte fiscal, el que és una mostra que “torna a anar contra Catalunya”. Queda dit! Més clar aigua...

"El día 21 la vida continuará de otra manera y con otros objetivos"

ENTREVISTA: a CARME CHACÓN de PERE RÍOS - EL PAÍS -15/11/2011

Tildada por sus adversarios de española en Cataluña y de catalana en Madrid, Carme Chacón (Barcelona, 1971) puede ser el domingo la única dirigente que salve los muebles de la dura derrota socialista que pronostican las encuestas. Sería una victoria amarga que la llevaría a la bancada de la oposición, pero que reforzaría las aspiraciones de Chacón con vistas al inminente congreso del PSC y al del PSOE que renunció a liderar hace unos meses. Ella no niega ningún escenario tras el día 20.

Pregunta. ¿Su carrera política puede salir reforzada pese al hundimiento del PSOE?

Respuesta. Le aseguro que no dedico ni un solo minuto a esa reflexión. Sigo estando al frente del Ministerio de Defensa, lo que no es un trabajo a tiempo parcial, del que dependen 130.000 personas que se juegan cada día la vida por nuestra seguridad. El 20 de noviembre siento una doble responsabilidad porque nos estamos jugando el modelo económico y productivo de nuestro país, y también el modelo social que hemos construido en 30 años de democracia, junto a nuestros derechos civiles.

P. Cuesta creer que una persona que aspiró a liderar el PSOE no piense en el futuro. ¿Sigue aspirando a suceder a Zapatero en el partido?

R. Yo aspiro a sacar un buen resultado. Tan bueno, que permita que Cataluña y España continúen avanzando. Solo el voto socialista puede frenar a esta derecha que pretende desmantelar el Estado de bienestar y que está privatizando la sanidad y la educación para hacer de ello un negocio. En eso y en el ministerio tengo concentrados todos mis esfuerzos. Ya vendrá el 21 de noviembre y el congreso del PSOE, pero primero ha de celebrarse el del PSC, en el que quiero participar activamente.

"Me preocupan más la apertura y la renovación del PSC que los nombres"

P. ¿Quiere decir que también aspira a suceder a José Montilla en el PSC?

R. Participar activamente quiere decir que tengo ganas de reflexionar con mis compañeros sobre qué le está pasando a la política, de cómo podemos acercarnos al sentir de los ciudadanos. Tiene que ser un congreso de apertura a la ciudadanía y de renovación de ideas. Eso me preocupa más que los nombres.

P. No descarta nada, pues.

R. A partir del día 20 la vida continuará de otra manera y con otros objetivos. Primero será el congreso del PSC y después el del PSOE.

P. O sea que deja todas las puertas abiertas.

R. Entiendo su insistencia en la pregunta. En su día tomé una decisión que expliqué ampliamente. Duermo tranquila con la decisión que tomé y desde ese mismo día me puse a disposición del candidato y a trabajar por mi candidatura por Barcelona. Con sinceridad le digo que estoy concentrada en el ministerio y en la campaña electoral.

P. ¿Rubalcaba debería dimitir y renunciar a liderar el PSOE si se confirman las encuestas y obtiene el peor resultado?

R. A esa pregunta debe responder él y ya lo ha hecho.

P. Lo que ha dicho es que su compromiso con el PSOE va más allá del 20-N.

R. Esa es su decisión y es respetable.

"El enemigo de la derecha no es la crisis, sino el Estado de bienestar"

P. Todos los sondeos coinciden en que los socialistas sufrirán una fuerte derrota. ¿Cómo se digiere eso?

R. Siento una doble responsabilidad para explicarle a la gente que nada será igual después de esta crisis. No podemos seguir compitiendo sin reglas en el mercado ni el sistema financiero como propone la derecha. Ni podemos competir a base de trabajo precario, de sueldos bajos, dinero fácil, todo lo que ha significado la burbuja inmobiliaria, que tuvo su origen en la ley del suelo de 1998 que pactaron la derecha catalana y la española. La derecha no tiene soluciones. Su enemigo no es la crisis, sino el Estado de bienestar.

"Suscribo a Keynes cuando dijo: 'Si las circunstancias cambian, yo cambio"

P. Pero, más allá de culpar a la derecha, ¿entiende que algunas de sus propuestas, como la dación en pago, puedan considerarse oportunistas si han estado ocho años en el Gobierno y no la aprobaron?

R. Los escenarios de esta crisis han sido cambiantes y el propio Gobierno ha ido tomando decisiones en función de lo que estaba sucediendo. Por ejemplo, en un momento determinado decidimos que para reactivar el consumo suprimíamos el impuesto de patrimonio y ahora hemos decidido recuperarlo con cambios. El anterior era obsoleto, gravaba a las clases medias, y el que hemos aprobado ahora grava las grandes fortunas patrimoniales, afecta a 160.000 personas de un total de 24 millones de contribuyentes. Esos ingresos los necesitamos ahora. Keynes decía: "Cuando las circunstancias cambian, yo cambio de opinión".

"La financiación vigente multiplica por 10 los ingresos del pacto CiU-PP"

P. ¿Cómo explica que Cataluña pueda ser la excepción el próximo domingo?

R. Cataluña sabe que solo el voto socialista puede parar la regresión en derechos sociales y civiles y en libertades que puede suponer la concentración de poder del PP. Hoy tenemos el mayor autogobierno que hayamos vivido nunca, con el mejor sistema de financiación, que ha multiplicado por 10 los ingresos respecto al pactado por el PP y CiU en 2001. Somos la comunidad número uno de toda España en inversión en infraestructuras, con más de 15.000 millones de euros ejecutados. Cataluña sabe que si vuelve a votar socialista seguirá avanzando y mantendremos nuestras fortalezas, como el sistema sanitario que hemos creadado en 30 años, uno de los mejores del mundo.

P. CiU gobernó durante más de 23 años la Generalitat hasta que llegó la izquierda. Algo tendrá que ver en ese logro que ahora parece en peligro por los recortes de Artur Mas.

R. El sistema sanitario catalán lo hemos construido entre todos, pero la ley de sanidad universal tiene un nombre: Ernest Lluch. Zapatero ha transferido en estos años 12.500 millones de euros a las comunidades autónomas para garantizar la sanidad. Hoy el PSOE es la garantía del sistema sanitario público, mientras que en Cataluña tenemos un consejero al que ha tenido que llamar la atención Amnistía Internacional por decir que eso de la sanidad es una cosa individual, de cada persona, y no de las Administraciones.

P. Pero el previsible castigo del electorado les vendrá de antiguos votantes socialistas y de la abstención. ¿Cómo lo explica, más allá de que la crisis castiga a todos los Gobiernos?

R. Eso está siendo una regla complicada de saltarse en toda Europa. Todos los Gobiernos han sufrido los efectos de la crisis. Tras la caída de Irlanda, Portugal y Grecia y el zarandeo que está sufriendo Italia, se demuestra que España ha hecho sus deberes y hemos tomado las medidas que debíamos tomar.

P. Josep Borrell verbalizó en Lleida un autocrítica que es infrecuente oír a los líderes socialistas.

R. Borrell advirtió hace ocho meses en una entrevista de que no valían solo las políticas de ajustes, de que necesitábamos políticas de inversión productiva, de estímulo al crecimiento. No se pueden hacer políticas de progreso y de bienestar sin hacer políticas progresistas en la economía, y hoy nos damos más cuenta que nunca de que es así. Solo el voto socialista garantiza una salida de la crisis para todos, sin dejar a nadie a su suerte.

Carme Chacón: "No ha hecho falta que el PSC vote diferente del PSOE"

"No nos dejaremos engañar otra vez por CiU y PP con el pacto fiscal", afirma la candidata del PSC por Barcelona

Elecciones generales 2011 | Carme Chacón, candidata del PSC por Barcelona, entrevista de Iñaki Ellakuría en LA VANGUARDIA -14/11/2011  

Carme Chacón tiene el mayor reto electoral de su efervescente carrera política: frenar la debacle electoral socialista. La ministra de Defensa avisa que sólo los socialistas podrán parar que "la derecha desmonte el Estado de bienestar".

- Hace cuatro años usted fue candidata en un contexto político favorable, ahora la cuestión es resistir...
Por ello siento una mayor responsabilidad que entonces. Veníamos de una legislatura que supuso un gran avance en derechos civiles y sociales: incremento de un 50% en pensiones mínimas, incremento del salario mínimo... Ahora estamos en un momento marcado por la crisis. La derecha no tiene la fórmula para acabar con la crisis, sino con el Estado de bienestar.

- Alerta sobre las recetas de la vieja derecha, pero los recortes de su Gobierno no es que fueran un canto al izquierdismo.
Han caído Grecia, Portugal, Irlanda. Nosotros tomamos las medidas necesarias para que España continuara en pie, para garantizar que somos capaces de pagar nuestras deudas. Pero también aumentamos el déficit público para proteger a las personas que peor lo están pasando con la crisis. Más allá del contexto internacional el factor que nos ha lastrado ha sido la burbuja inmobiliaria: de los 2,5 millones de parados nuevos de esta crisis un millón ochocientos mil provienen de la explosión de la burbuja.

- ¿Como ex ministra de Vivienda no se siente algo responsable?
Al llegar al Gobierno derogamos la ley del Suelo de 1998 de PP y CiU. Una ley que aumentó un 500% el precio del suelo y un 150% el de la vivienda. Nosotros empezamos a pinchar la burbuja apostando por la vivienda protegida y el alquiler.

- ¿Por qué no aplicaron en el Gobierno esas medidas que proponen ahora?
Keynes decía: cuando las circunstancias cambian, yo cambio de opinión, ¿usted qué hace? Nosotros tomamos las medidas necesarias para que no nos pasara como a otros países. Si fuera por el PP, España estaría intervenida.

- ¿La solución pasa, pues, por subir los impuestos?
Sólo el crecimiento crea empleo. Mientras no crezcamos necesitamos los ingresos suficientes para estimular la economía y crear empleo. Por eso pedimos un esfuerzo a los bancos, a los que ayudamos con avales que ya han devuelto con intereses, y proponemos un impuesto a las grandes fortunas. Pedimos un esfuerzo adicional a los que más tienen.

- Y la administración y los funcionarios, ni tocarlos...
Debemos ser austeros en el gasto corriente. Proponemos administraciones más austeras y eficientes. Pero la mayor parte de la deuda española no es de la administración. Dos tercios corresponde a empresas y particulares.

- Reivindica la labor del Gobierno socialista, ¿por qué Zapatero está desaparecido en campaña?
El presidente está concentrado en los consejos europeos, en el G-20, en la repercusión en esta crisis, en la recuperación de España. Sigue con mucha atención la campaña y hablo habitualmente con él.

- Pone el acento en la dicotomía derecha-izquierda, pero Europa habla de tecnocracia...
Donde más hace falta el liderazgo político es Europa. Cuando más fuerte lo hemos necesitado, más débil ha estado. De hecho nos hemos encontrado una Europa demasiado alemana y una Alemania poco europea.

- ¿Es partidaria, como dijo Rubalcaba, de frenar dos años los ajustes europeos?
Necesitamos equilibrio en las medidas que toma Europa. Hay que lanzar un mensaje a los mercados de que pagamos nuestras deudas, pero necesitamos también políticas productivas, una política monetaria expansiva. Yo confío en que el Fondo de Estabilidad bancaria sea el embrión de un Tesoro Europeo.

- El filósofo francés Gilles Lipovetsky ha dicho: "No podemos culpar a los mercados de la incapacidad de nuestros líderes de gobernar y de la nuestra a la hora de elegirlos".
Le doy mucha relevancia al movimiento 15-M. Desde el principio he escuchado sus mensajes y sus propuestas. Hemos incorporado en nuestro programa la dación en pago. Los indignados le están pidiendo a la política respuestas más inmediatas frente a la crisis. Los ciudadanos quieren sentirse más implicados en la democracia, más allá de votar cada cuatro años.

- ¿Y qué propone usted?
Desbloqueo de listas electorales, facilitar la iniciativa legislativa popular y el escaño 351, para que un ciudadano pueda venir a defenderlas al Congreso.

- Hace unos días su campaña se vio enturbiada por el polémico vídeo que vinculaba recortes sanitarios y muerte...
Pedí que lo retiraran porque podía molestar algunas sensibilidades, pero sólo era una ficción. La realidad de la sanidad catalana es muy dura. En nueve meses CiU ha hecho retroceder nuestra sanidad siete años, aumentando las listas de espera, eliminando camas de críticos, cerrando urgencias...

- El Govern alega que no hay dinero para mantener este sistema...
El modelo sanitario es viable. Es uno de los mejores del mundo. La derecha quiere hacer negocio con la sanidad. Nosotros proponemos un paquete suficiente de ingresos para garantizar nuestra sanidad: 8.000 millones, un incremento del 10% al alcohol y el tabaco y acabar con el turismo sanitario. Recuerdo que Zapatero ha inyectado más de 12.500 millones de euros a las autonomías para la sanidad.

- CiU dice que con un pacto fiscal esos problemas de financiación se resolverían...
Ya hablaron de pacto fiscal en 1999. No dejaremos que nos vuelvan a engañar. El último pacto que hicieron en el 2001 PP y CiU nos salió carísimo a los catalanes. El actual modelo multiplica por diez aquellos ingresos. En el 2013 tenemos una revisión del sistema de financiación y queremos mejorarlo.

- El PSC habla ahora del "pacto fiscal federal"...
Bajo cuatro premisas: agencia tributaria propia en consorcio con el Estado; mayor reconocimiento del esfuerzo fiscal catalán; reglas claras entre los gobiernos; que el sistema de financiación avance en sentido federal y equipare los ingresos del régimen común con los del régimen foral.

- En la pasada legislatura el PSC no votó ni una sola vez distinto al PSOE en el Congreso.
No fue necesario, aquello que no nos gustó lo paramos antes. Lo que nunca hemos hecho es votar las investiduras de Aznar o el Plan Hidrológico Nacional.

- ¿Por ejemplo?
La ley de Puertos. Los ponentes de PSOE y PP llegaron a un acuerdo que vulneraba las nuevas competencias del Estatut y me planté y dije que el PSC no lo votaría. El PSOE cambió la ley.

- La reforma exprés de la Constitución no gustaba al PSC pero usted la ha defendido.
No me gustó la forma en la que se llevó a cabo, sin consultar a los ciudadanos, pero fue necesaria por el contexto internacional.

- Su compañero de Gobierno José Blanco se ha visto salpicado por un caso de presunta corrupción, ¿pondría la mano en el fuego por él?
Está en manos de la justicia. Él ha dicho que quiere ir cuanto antes a la justicia para conocer los cargos que se le imputan y poderse defender.

- Y después del 20-N, ¿Barcelona o Madrid? ¿PSC o PSOE?
El del PSC es un congreso relevante, que debe ser de apertura y renovación. Tengo ganas de participar activamente.

- Usted optó por el liderazgo del PSOE frente a Rubalcaba. ¿Es una aspiración olvidada?
Estoy totalmente concentrada en la campaña. Este 20-N nos jugamos todos los avances en derechos sociales y libertades que hemos conseguido en estos treinta años. También los avances que ha logrado Catalunya.

- Una bona visió de debat del divendres 11 de novembre a TV3 per les eleccions generals del 20-N a Catalunya:

Nivel 'trending topic'

MARGARITA RIVIÈRE - EL PAÍS -14/11/2011

La televisión es traidora: no perdona cuando quien la utiliza pretende seducir a quien la mira

Un millón largo de catalanes vieron en algún momento el debate electoral a cinco la otra noche. Era la única oportunidad para observar cómo espabilan nuestros candidatos a cortar el bacalao en Madrid y qué ideas manejan sin más intermediarios que ellos mismos. Candidatos al desnudo. Para esto sirve la tele pública: los caminos del señor son inescrutables. Allí estuvieron Chacón (PSC), la única mujer y ministra; Duran (CiU) con sus gafas de montura roja; Fernandez Díaz (PP) arropado por una afonía a lo Vidal-Quadras; Bosch (ERC), un espectacular novato, y Coscubiela (ICV) con su camisa gris de sindicalista. ¿Poco apetecible? Es lo que hay. Y con lo que hay estos señores y señora lograron -según TV-3- ser el tercer trending topic mundial de aquellas casi dos horas. ¡Hurra! ¿No es eso lo que realmente se perseguía: llamar la atención del mundo arrinconando incluso a Berlusconi?

Ignoro si el mundo pudo tener ganas, en algún momento de aquella efervescencia -contemplada por la moderadora Ariadna Oltra con la objetividad con la que se disecciona a un grupo de extraterrestres-, de votar a alguno de los cinco catalanes, pero todos ellos se esforzaron para llegarnos al alma y celebrar el domingo 20-N con nuestro voto. Y, vive Dios que, visto lo visto, puede haber un montón de ganas de votar, precisamente, para impedir que salga alguno de ellos. ¡Qué tentación!: todos hicieron méritos -no idénticos, desde luego- para lograr nuestro voto a la contra, que es la manera más brutal de votar: el último recurso de la democracia. El último recurso, en fin, de la voluntad de hacer uso de las libertades adquiridas con esfuerzo y afrontar las urnas de forma paradójicamente positiva. Amigos, entendedlo bien: ¡se trata de que no se lleve el gato electoral al agua quien pueda jugárnosla, aun con la mejor intención, todo sea dicho!

Nadie duda, pues, que los cinco candidatos querían impresionarnos, resultar inolvidables. Lo lograron: el debate pasará a la historia por ser una muestra incuestionable -en la forma en la que lo es el dato de fracaso escolar- del nivel sociopolítico de Cataluña. No siempre las mejores intenciones se corresponden con lo que estas denotan. Y la televisión es traidora: no perdona cuando quien la utiliza pretende seducir a quien la mira. Por ello hay que alabar la valentía de Carme Chacón, que se lanzó al ruedo peinada por ella misma -cosa notablemente exótica en las televisiones actuales- y permaneció impasible cuando Fernandez Díaz la señaló como presunta responsable de la burbuja inmobiliaria mientras ella fue ministra de la Vivienda. Chacón ignoró que ese era, precisamente, su punto débil, lo cual dio medida de su inteligencia política. Fue la única que calló a tiempo.

"El 21 de noviembre solo habrá un grupo catalán en Madrid, y seremos nosotros" dijo Duran, tras haber afirmado segundos antes: "Todos los que estamos aquí somos catalanes". Vaya: volvemos otra vez a los de los buenos y los malos catalanes. Y todos sabemos quiénes son unos y otros: por un lado los que defienden "el derecho a decidir" y por el otro los que teóricamente ayudan a que decidan los enemigos de Madrid. Casualmente, entre estos últimos no está Coscubiela, que pasa por amigo de Cayo Lara y compañía. Las contradicciones son la sal de la vida y de la campaña electoral.

Al sindicalista izquierdoso-verde catalán el debate le sentó solo regular: "El paro se solucionará con más servicios públicos", aseguró. ¿Es ese su programa: más funcionarios? Seguro que le entendimos mal. En cambio, el novato Bosch habló claro: "els catalans de les pedres en fan pans" es su filosofía de base. Su análisis resulta clarividente: "Cataluña no es Grecia. Cataluña vive por debajo de sus posibilidades", por fin una nota de optimismo. Y también un alarde de sinceridad: "El Estado de las autonomías nos empobrece", dijo literalmente; ¿cabe entender que por ahí ERC sintoniza con un PP que nunca ha olvidado el invento fraguiano de la Administración única?

¿Veíamos un debate o Polonia? ¡Ay de nosotros, catalanes! No es el miedo lo que nos atenaza. Mientras nos empeñemos en que la política sea trending topic no habrá voto que resista este desierto cultural.